Carl Gustav Jung descubre la importancia de la expresión
artística en nuestras imágenes internas. Entiende que dar forma a lo que carece
de ella nos permite comunicar lo que antes era incomunicable y que este hecho
revierte de forma importante sobre nuestra psique:
“En la medida en que lograba traducir mis emociones en
imágenes, es decir, hallar aquellas imágenes que se ocultan tras las emociones,
sentía tranquilidad interna… Mi experimento me afirmó en la convicción de lo
valioso que es, desde el punto de vista terapéutico, hacer conscientes las
imágenes que se hallan detrás de las emociones”.
Jung descubre dos espacios diferenciados en la psique humana
a los que llama el inconsciente personal y el inconsciente colectivo,
arquetípico. La expresión artística nos conecta con esos espacios
inconscientes.
Katharina
Widmer
Espacio Humano nº 187